Como ya te venimos contando, empezar a meditar empieza por tomar conciencia de que no somos los pensamientos que nuestra mente piensa.
Bueno, ahora vamos a dar un paso más: empezaremos un trabajo diario para reconocer que lejos de ser nuestros pensamientos, somos una conciencia que necesita usar la mente para pensar. Y no al revés.
Para eso, hoy te vamos a mostrar los pasos que debes seguir para empezar este trabajo de observación meditativa:
1- Busca un diario o agenda para completar todas las noches antes de dormir.
2- Prepárate como si fueras a meditar: movimientos suaves, respiración rítmica, postura cómoda, estado de silencio y apertura, concentración.
3- Escribe sobre el tema del trabajo y la salud: qué te genera atracción, qué te genera rechazo y qué te genera indiferencia.
4- Recordá anotar los hechos de atrás hacia adelante, empezando por lo último que hiciste, hasta el momento en que te levantaste.
5- Esta manera de agendar los sucesos de la vida, las daban los grandes maestros orientales a sus discípulos para que puedan conocerse a través de sus reacciones o respuestas y así separar la conciencia de la mente.
¡Empezá hoy a observarte!